Querida Santa Teresa, habiendo cruzado toda Francia para venir a verte, queríamos que mi esposa y yo te agradeciéramos la curación de nuestro hijo. Ahora está fuera de peligro y se está recuperando lentamente de esta terrible experiencia. Cuida de nuestra familia. Gracias por haber respondido a nuestras oraciones. Te estamos agradecidos. Gracias, gracias, Santa Teresa.